Introducción:

La salud oral, lejos de ser un ámbito aislado, guarda una estrecha relación con la salud sistémica del individuo. Esta conexión bidireccional se fundamenta en la interacción constante entre la cavidad bucal y el resto del cuerpo. Diversas investigaciones han demostrado que las enfermedades bucodentales, como la periodontitis y la caries dental, pueden ser precursoras o agravar condiciones sistémicas como las enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, partos prematuros y enfermedades respiratorias.

Mecanismos de interacción:

1. Vía hematógena: Las bacterias orales, al no ser controladas, pueden ingresar al torrente sanguíneo a través de las lesiones en las encías o tejidos periodontales. Estas bacterias pueden alojarse en diferentes órganos y tejidos, desencadenando respuestas inflamatorias y aumentando el riesgo de enfermedades sistémicas.
2. Vía inflamatoria: La enfermedad periodontal crónica genera una respuesta inflamatoria sistémica sostenida, la cual se asocia con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus y otras condiciones crónicas.
3. Vía respiratoria: Las bacterias orales pueden ser aspiradas hacia el tracto respiratorio inferior, aumentando el riesgo de neumonía e infecciones respiratorias.

Enfermedades sistémicas asociadas a la salud oral:

1. Enfermedades cardiovasculares: La periodontitis se ha asociado con un mayor riesgo de aterosclerosis, infarto de miocardio y accidente cerebrovascular. Las bacterias orales pueden contribuir a la formación de placa en las arterias, aumentando el riesgo de eventos cardiovasculares.
2. Diabetes mellitus: La enfermedad periodontal puede ser un factor de riesgo para desarrollar diabetes tipo 2 y dificultar el control glucémico en personas ya diagnosticadas.
3. Parto prematuro y bajo peso al nacer: La enfermedad periodontal grave se ha asociado con un mayor riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.
4. Enfermedades respiratorias: La enfermedad periodontal se asocia con un mayor riesgo de neumonía e infecciones respiratorias.

Importancia de la prevención y el tratamiento:

Mantener una buena higiene oral, con cepillado dental dos veces al día, uso de hilo dental y visitas regulares al odontólogo, es fundamental para prevenir enfermedades bucodentales y reducir el riesgo de desarrollar enfermedades sistémicas.

Conclusión:

La salud oral es un componente fundamental de la salud sistémica. La prevención y el tratamiento oportuno de las enfermedades bucodentales son esenciales para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades sistémicas y mejorar la calidad de vida del individuo.

Recomendación:

Es importante que los profesionales de la salud, tanto médicos como odontólogos, brinden a sus pacientes una atención integral que considere la relación bidireccional entre la salud oral y la salud sistémica.

Bibliografía:

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3. http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1699-65852004000200004
4. https://www.drahumada.com/procedimientos/enfermedades-periodontales-/las-enfermedades-periodontales-y-respiratorias/