La Odontología Neurofocal, un nuevo paradigma en las ciencias de la salud oral.

En medio del conformismo en el que nos encontramos actualmente aceptamos la información que se hereda  de generación en generación como única verdad lógica de todo aquello que existe. Cuando alguien o algo entra en la vida del ser humano para cambiarlo se toma como un atropello a sus creencias, por lo  general no se acepta y se recrimina, siendo este un mecanismo de defensa de la ignorancia humana. El cambio, no en pocas ocasiones, se presenta con el vestido de la amenaza y frente a él muchas caras se tornan desconfiadas.

Las medicinas complementarias nacieron hace más de un siglo, por la necesidad del ser humano de encontrar respuestas ante las enfermedades que día a día iban apareciendo y que la medicina tradicional no permitía analizar desde el punto de vista relacional de los fenómenos  humanos. La medicina tradicional defendía una visión única de la causa que originaba la enfermedad y no aceptaba todas las posibles conexiones y relaciones de los órganos y sistemas entre sí, descartando, por ejemplo, la posible relación de las enfermedades con la mente y emocionalidad de los pacientes, o la relación, en nuestro caso, de los dientes, con otros órganos humanos.  Algunas de estas medicinas complementarias que surgieron fueron la acupuntura china (arte de curar, basado en la colocación de agujas metálicas en puntos determinados del cuerpo), el naturismo (forma de vida en armonía con la naturaleza, caracterizada por la práctica del desnudo en común con la intención de favorecer el respeto por uno mismo, por lo demás y por el medio ambiente) y la moxibustion ( Es un método que trata y previene enfermedades aplicando calor por medio de conos o cigarrillos de moxa ardiente sobre ciertos puntos del cuerpo humano ), entre otras. Estas formas  permitieron una nueva visión en el campo de las medicinas. Desde entonces se vienen practicando con excelentes resultados.

No ha sido fácil la aceptación de las nuevas medicinas y el reconocimiento de las mismas dentro del círculo médico, pero los resultados obtenidos con ellas, poco a poco  han hecho que las medicinas complementarias vayan escalando una posición de aceptación por parte de la sociedad  de consumo. En ocasiones este crecimiento se   ve afectado por la actitud o resistencia de cambio de algunos profesionales de la salud.  Por tal razón se pretende por medio de este ensayo mostrar que una mente abierta por parte del odontólogo es importante ante cualquier situación de cambio, para lograr la aceptación  del paciente frente a la odontología neurofocal y sus beneficios.

Las universidades actualmente se están interesando en capacitar profesionales calificados que se interesen por la investigación y enseñaza de las medicinas complementarias, en nuestro caso la terapia neural y la odontología neurofocal proporcionando un adecuado diálogo entre los conocimientos convencionales y los alternativos logrando así que los profesionales abran su mente a un cambio de ideas, de forma de pensar y actuar en la odontología sin perder su esencia

A continuación se presentarán algunos casos clínicos donde la terapia neural y la odontología  neurofocal nos demuestran   su efectividad en la salud oral.

El primer caso clínico desde España: (no dispongo de radiografías). 
Este caso indica la importancia de las cordales en el mantenimiento o el empeoramiento de muchas enfermedades crónicas.

El amigo nació con problemas locomotores desde el nacimiento. Diagnóstico: parálisis cerebral de tipo esplástico. Aún le quedan las secuelas en las piernas. Afortunadamente (hace 10 años) acudió a un médico de orientación holística que además de tratarlo con acupuntura y medicina natural le recomendó la extracción de tres “muelas de juicio”. Le hizo caso y se las extrajo.

A continuación sus propias palabras: “Cuando me extirparon las muelas note un cambio drástico, inmediato y casi temeroso; me aligeró la marcha por momentos y las piernas parecían ser de pluma en lugar de hierro, como me habían parecido hasta aquel momento”.

Después de un tiempo sufrió los efectos de una “cierta recesión” en su condición.
Esto se debe a que no es suficiente la sola extracción o remoción del campo interferente sino que después y con la finalidad de desbloquear energéticamente y favorecer la osificación de las zonas en las que se encontraron las cordales, son necesarias varias sesiones de terapia neural además de una medicación homeopática específica “testada” individualmente con cualquier método bioenergético.
Unicamente de esta manera se llega, aunque no a la curación, como en el caso del amigo, por lo menos a una sensible y definitiva mejoría.
Aún a los 10 años vale la pena intentar el tratamiento odontológico con terapia neural, aunque como se sabe y según SPERANSKY, el factor tiempo es uno de los peores enemigos de la curación.

Segundo caso. Caso clínico del mes: un dolor no dental

Este es un caso sencillo que se nos presenta frecuentemente en la consulta odontológica general.

Paciente  femenina, de 30 años de edad, quien se presenta a la consulta con un dolor difuso, continuo que le había comenzado una semana antes, en la región de la mejilla a nivel de la raíz los dientes 14, 15,16 y 17. 

A la palpación intraoral sobre las raíces y a la percusión sobre las coronas no presenta sintomatología. El único sitio extraoral que le dolía era el punto de reflejo correspondiente al seno maxilar  lado derecho,  ubicado en la intersección de las líneas de la prolongación del ala de la nariz (parte inferior) y de  la pupila. Se  le realizaron estudios radiográficos , los cuales  no  revelaron  patología local alguna con la excepción de puntos proximales  compatibles con pérdida de la sustancia calcificada (ver Figura).
 
 

Figura: radiografía del caso descrito.

El interrogatorio más amplio de la paciente reveló que en todos estos días había tenido problemas gastrointestinales y digestivos.  Es conocido tanto de la acupuntura como del sistema diagnóstico sistémico según R. VOLL , que los senos maxilares representan zonas de reflejo relacionadas con las vías energéticas correspondientes al sistema gastrointestinal: intestinos grueso, delgado, estómago, páncreas etc.

Se realizó tratamiento: terapia neural con inyección de Lidocaína al 3% a nivel de las raíces, una por distal del canino y la otra en la raíz del segundo molar (en total un carpule de 1,5cm3) .

Resultado: el día siguiente la paciente estaba completamente asintomática. 

Conclusiones de los casos: El odontólogo debe  tener mucha precaución con los dolores y las molestias difusas difíciles de identificar y de clasificar y abstenerse de comenzar la terapia con tratamientos invasivos como por ej. el tratamiento de conducto. En este caso el dolor del seno maxilar se presentó unilateralmente lo que nos debe alertar, previo descarte de los dientes u osteítis como causa, en la presencia de una relación holística con otras partes del organismo capaces de influenciar energéticamente, aunque estén alejados. Si un dolor de los senos maxilares se presentase bilateralmente habría que pensar mas bien en una etiología sinusal propiamente dicha.

Los dos casos citados son un claro ejemplo de una odontología que va más allá del tratamiento mecanicista y unidimensional. Los grandes resultados obtenidos con  un diagnóstico más profundo, que involucra la relación de la cavidad oral, con otros órganos del cuerpo, permitieron que los pacientes encontraran respuestas y soluciones a sus dolencias y a enfermedades que mediante un tratamiento tradicional no se hubieran vinculado con la salud oral.

El cambio de paradigma que plantea la odontología neurofocal, tiene que ver con una superación de la visión esteticista y mecanicista de la odontología, a una visión más amplia, que abarca la conexión de los dientes con todos los demás órganos del cuerpo y desde este punto de vista coloca a la odontología como una ciencia promotora de la salud integral.

Este cambio solo es posible asumirlo desde una mentalidad abierta, que considere   posibilidades, es decir requiere de una nueva actitud por parte del odontólogo, que piense que al analizar nuevas alternativas de acción beneficiará a sus pacientes no solo en su salud oral, sino en un conjunto de cuerpo, mente y emoción.

Concluyendo, existe un gran temor frente al cambio y esto incluye a la medicina. Las medicinas complementarias se presentan actualmente como un reto de superación a la visión mecanicista de la odontología. Este reto solo puede ser asumido por profesionales con mente abierta al cambio. La odontología neurofocal plantea un nuevo paradigma que asume a la odontología como ciencia promotora de la salud integral.

Cabe decir, que la odontología neurofocal no pretende reemplazar a la medicina, sino servirle de apoyo a la hora de un diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, desde su campo que es la cavidad oral. Desde este nuevo paradigma se podría decir, desde la relación diente-órgano.